El invierno y su impacto en las personas afectadas de esclerosis múltiple
Los cambios de temperatura pueden afectar algunos síntomas que experimentan las personas con esclerosis múltiple (EM.) Las temperaturas más frías pueden tener un efecto sobre los nervios y la actividad muscular, provocando dolor y problemas de movilidad que incluyen calambres, rigidez y espasticidad.